Dualidad Onda-Partícula
Como consecuencia de directa de la hipótesis de De Broglie se tiene que si las partículas se comportan como ondas, tales partículas tienen los atributos propios de las mismas, es decir longitud de onda y frecuencia. Según Sears et all (2005, p.1490), De Broglie deduce y postula que deben tener una masa m (en reposo) moviéndose a una velocidad v (no relativista) pero además, con una longitud de onda en relación con su cantidad de movimiento y la constante de Planck h, ósea que “todo objeto físico se propaga como onda e intercambia energía como partícula” (Tipler & Mosca, 2010, p.1187) A partir de ello, se obtiene la ecuación para la longitud de onda de De Broglie:
Como consecuencia de directa de la hipótesis de De Broglie se tiene que si las partículas se comportan como ondas, tales partículas tienen los atributos propios de las mismas, es decir longitud de onda y frecuencia. Según Sears et all (2005, p.1490), De Broglie deduce y postula que deben tener una masa m (en reposo) moviéndose a una velocidad v (no relativista) pero además, con una longitud de onda en relación con su cantidad de movimiento y la constante de Planck h, ósea que “todo objeto físico se propaga como onda e intercambia energía como partícula” (Tipler & Mosca, 2010, p.1187) A partir de ello, se obtiene la ecuación para la longitud de onda de De Broglie:
Análogamente,
se tiene que las partículas tienen una frecuencia derivada de la expresión de
Einstein E = hƒ, de forma que
f=E/h, donde E es la energía
total de la partícula.
El hecho de que las partículas puedan presentar una naturaleza dual, donde las características propias de las mismas y también la posibilidad de propagarse en forma de ondas electromagnéticas con sus propiedades, constituyen comportamientos de modelos aparentemente contradictorios. Esta situación conflictiva viene a resolverse con el principio de complementariedad enunciado por Bohr en 1928 e indica que “los modelos ondulatorios y de partículas, ya sea de la materia o de radiaciones, se complementan entre sí. Ninguno de los modelos puede utilizarse de manera exclusiva para describir adecuadamente ya sea la materia o la radiación.” (Serway & Jeweett, 2009, p.1169)
Es precisamente esa dualidad complementaria la que hace que “en principio, es imposible medir simultáneamente la posición y el momento lineal de una partícula con una precisión ilimitada” (Tipler & Mosca, 2010, p.1188). Esto se conoce como principio de incertidumbre.
El hecho de que las partículas puedan presentar una naturaleza dual, donde las características propias de las mismas y también la posibilidad de propagarse en forma de ondas electromagnéticas con sus propiedades, constituyen comportamientos de modelos aparentemente contradictorios. Esta situación conflictiva viene a resolverse con el principio de complementariedad enunciado por Bohr en 1928 e indica que “los modelos ondulatorios y de partículas, ya sea de la materia o de radiaciones, se complementan entre sí. Ninguno de los modelos puede utilizarse de manera exclusiva para describir adecuadamente ya sea la materia o la radiación.” (Serway & Jeweett, 2009, p.1169)
Es precisamente esa dualidad complementaria la que hace que “en principio, es imposible medir simultáneamente la posición y el momento lineal de una partícula con una precisión ilimitada” (Tipler & Mosca, 2010, p.1188). Esto se conoce como principio de incertidumbre.